El presidente de Bolivia, Evo Morales, dio hoy el primer paso en la implementación de su plan autonomista pese al rechazo de la oposición regional que considera que el proyecto no refleja sus demandas de descentralización.
Los cinco gobernadores oficialistas del país acudieron hoy a la cita con Morales para abrir un proceso de diálogo y dar los primeros pasos para implementar el modelo autonómico reflejado en el proyecto de Constitución que será sometido a referendo el próximo 25 de enero.
Los cuatro prefectos opositores se negaron a asistir al encuentro porque eso hubiera significado anticiparse al referendo constitucional "menoscabando la voluntad popular", según una carta hecha pública por el de Santa Cruz, Rubén Costas.
Los gobernadores opositores de Beni, Tarija, Santa Cruz y Chuquisaca además están haciendo campaña por el "no" a la nueva Constitución, lo que para Morales implicaría que el régimen autonómico no se podría implementar en Bolivia hasta el año 2017.
Entre agosto y septiembre pasados, las protestas de los opositores autonomistas sumieron al país en una ola de violencia que en su peor momento causó en la región de Pando la muerte de 22 personas, 20 campesinos seguidores de Morales y dos opositores.
Los conflictos terminaron con la mediación de varios organismos internacionales y un acuerdo entre el oficialismo y parte de la oposición para cambiar cien artículos del texto constitucional que será sometido al referendo en tres semanas.
El viceministro de Descentralización, Fabián Yaksic, al inicio del encuentro de hoy al que sí acudieron los gobernadores oficialistas de Potosí, Oruro, Cochabamba y La Paz, tachó a los prefectos opositores de "traidores a sus regiones".
"No será suficiente rezar por las autonomías, lo que hay que hacer es trabajar por las autonomías", dijo Yaksic, en alusión a un encuentro religioso convocado para mañana en Sucre por los gobernadores de oposición.
"Una pena que no tengamos acá precisamente a quienes han estado impulsando el proceso autonómico", lamentó el viceministro al recordar que la lucha por las autonomías fue una de las principales banderas de la oposición regional al Gobierno de Evo Morales.
En ese sentido, el ministro de Defensa Legal de las Recuperaciones Estatales, Héctor Arce, comentó a su entrada a la reunión que para él los prefectos opositores utilizaban el anhelo autonómico para fines "oscuros" y "mezquinos".
"No por la inasistencia de cuatro personas se ha de suspender o se ha de postergar una reforma tan importante", agregó Arce al tiempo que señaló que Bolivia ha de convertirse en "una república con autonomías departamentales".
"Con ellas llegará el progreso, llegará el desarrollo a las regiones", aseguró.
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